Comenzamos este segundo capítulo de El sonido del bronce recuperando las palabras que Mercedes Guillén, mujer de Baltasar Lobo, dedica a Pablo Picasso en la obra “Picasso y los exiliados”. El genio malagueño recibía a los artistas e intelectuales españoles en el exilio, atendía sus necesidades y enviaba la ayuda oportuna a sus familias. Pablo Picasso tomó partido decididamente por la causa republicana y se implicó en contra de la guerra y del franquismo, situándose al lado de los jóvenes talentos españoles cuyas creaciones brotaban del dolor y la desesperanza de los campos de reclusión franceses.
Mercedes Guillén y Baltasar Lobo fueron dos de aquellos afortunados españoles que encontraron en Picasso el eslabón clave para sobrevivir a las guerras. Solo con estas pinceladas de la biografía del genio cubista nos sobran los motivos para dedicar a Pablo Picasso, en plena celebración del cincuentenario de su fallecimiento, el segundo capítulo de El sonido del bronce que no podía llamarse de otra forma, atendiendo a la relación del malagueño con nuestro escultor Baltasar Lobo: “París, Picasso”. Lo hacemos con la visión del experto Miguel Cabañas Bravo, historiador, investigador del CSIC y especialista en la relación entre arte y política en el siglo XX. Subimos, de nuevo, el volumen de El sonido del bronce. ¿Preparado?
Programa: El sonido del bronce 1×2: “París, Picasso”.
Duración: 27.28 minutos.
Guion y locución. José María Sadia.
Producción y edición: Oratio Comunicación para el Museo Baltasar Lobo.
Voz corporativa: Carlos Valdés.
Fotografía: Pablo Ruiz Picasso en 1908. Dominio público.
